Habla el creador de la cancha LED: «Apenas hemos visto su potencial»

Lea también

Revolución y nueva dimensión han sido algunas de las palabras más utilizadas por jugadoras, cuerpos técnicos, leyendas y medios especializados al hablar de la impactante cancha que estrenó FIBA en la Copa del Mundo U19 femenina organizada por la FEB y que convertía la superficie de juego en una pantalla de televisión gigante.

“Es la primera vez que hemos podido implantar este proyecto, esta superficie y el retorno que hemos recibido de jugadoras y seleccionadores está muy por encima de las previsiones optimistas. Ha sido muy positivo. Está claro que en relación a lo que es el evento y explotación se pueden embellecer cosas, pero era la primera vez”, explica Bart Prinssen, Head of Equipment & Venue Centre de FIBA al analizar la implementación de la cancha ASB GlassFloor.

El éxito ha sido total, las jugadoras -que han agradecido la apuesta de FIBA al escoger su reto y dar así visibilidad al baloncesto femenino- y seleccionadoras han alucinado al tiempo que confesaban que no paraban de mandar videos a casa ante la avalancha de preguntas. “Y apenas hemos visto un esbozo del potencial que tiene, hay cosas que podemos desarrollar en los próximos años que ahora mismo no nos las podemos ni imaginar de cara al enamorado en el pabellón y para el espectador que está en casa”, remata Prinssen.

El camino no ha sido fácil. “Llevamos trabajando desde 2007 en este concepto de la superficie de juego LED y logrando la acreditación de FIBA para partidos de primer nivel y luchando para que sea un concepto que le guste a los deportistas. Hemos llegado a este Mundial y cualquier atisbo de preocupación, duda o miedo por parte de las jugadoras se disipó y desactivó de antemano gracias a la información que les hizo llegar, a una maravillosa aprobación con una leyenda del baloncesto en un video que se proyectó en la cancha… Podían parecer escépticas en un primer momento, pero en cuanto tocaron la cancha, vieron que el agarre de las zapatillas era bueno y que el sonido era el de siempre, les gustó… sonrieron. La respuesta que hemos recibido tras los entrenamientos y partidos ha sido muy buena… incluso una jugadora francesa dijo que parecía magia”, cuenta Christof Babinsky, ASB GlassFloor Managing Director, que enfatiza que la cancha es “multifuncional, económica, ecológica e inclusiva”.

Cuando se le pregunta al artífice del ASB GlassFloor sobre el potencial del producto y lo que se ha visto hasta el momento, sonríe: “Cuando nos sentamos inicialmente para ver cómo iba a ser la imagen que se iba a proyectar, se habló simplemente de líneas sobre imagen blanca y únicamente cuando el balón estuviese fuera, veríamos ‘algo’ proyectado… pero hemos visto hasta animaciones sutiles tras algunas canastas y creo que esto ha sido algo valiente por parte de FIBA. Estoy muy feliz y orgulloso de que haya sido así. El potencial que tiene la cancha es tremendo. Si lo miras desde un punto de vista de patrocinio hay más de 15 posibles opciones. Ahora el objetivo es crecer desde donde estamos, mostrárselo a patrocinadores y fuerza comercializarlo”.

¿Una cancha para que los enamorados interactúen?

El futuro esta aquí. Fue uno de los puntos destacados en los medios. Babinsky lo ratifica y dibuja un escenario espectacular: “Hemos podido ver una pequeña muestra del potencial de la cancha, ahora se trata de sacar el máximo provecho. Podríamos mostrar estadísticas de los jugadores, de quién es el MVP del momento cuando haya un tiempo muerto, por ejemplo, y qué jugadores se le acercan… e incluso luego podríamos mostrar un código QR que te permitiría apostar, otra opción sería que una empresa patrocinara ‘el salto’ más alto del encuentro… hay que pensar que la cancha puede ser una pantalla gigante para proyectar y patrocinar lo que se quiera dando el protagonismo a los jugadores y el patrocinador logra un escaparate magnífico”.

“Creo que como mucho en esta Copa del Mundo hemos podido ver un 30% del potencial de esta cancha en los partidos y podría ser mayor si los jugadores llevaran un dispositivo rastreador para reflejar sus estadísticas, su aceleración, posicionamiento… Imagina el espectáculo de los descansos, podrían montarse juegos interactivos con los enamorados tras un registro previo, juegos virtuales como hemos hecho con el voleibol en Alemania con tres jugadores jugando con una pelota virtual, se podría realizar una carrera virtual de cuatro coches que conducirían en remoto por sus teléfonos cuatro enamorados… Queremos llevar y levantar la experiencia al futuro nivel porque eso supondrá una mayor activación de patrocinios y además lograríamos suplir a los anuncios convencionales de la televisión al ofrecer este contenido a los espectadores, que se quedarían a verlo evitando la tentación de cambiar de canal”, enfatiza el ideólogo del ASB GlassFloor.

“Al principio todos me decían que estaba loco… ¿Cristal y zapatillas? Alguien del mundo del baloncesto en 2014 me dijo, cuando estábamos luchando por obtener la aprobación de FIBA, que si algo tenía claro era que un jugador jamás jugaría en una superficie que no fuera madera y que me recomendaba que dejara de acosar esta idea. Me dije a mi mismo ‘reto aceptado’ y tengo que decir que FIBA nos ha ayudado y apoyado mucho. Está claro que no ha sido nada fácil y que cada prueba, cada test, ha sido muy meticuloso y duro y seguro que ningún suelo ha sido testado tanto en los últimos cuatro años”, subraya Babinsky, y añade: “Cuando nos sentamos inicialmente para ver cómo iba a ser la imagen que se iba a proyectar, se habló simplemente de líneas sobre imagen blanca y únicamente cuando el balón estuviese fuera, veríamos ‘algo’ proyectado… pero hemos visto hasta animaciones sutiles tras algunas canastas y creo que esto ha sido algo valiente por parte de FIBA. Estoy muy feliz y orgulloso de que haya sido así”.

Ayuda a calentar, evapora el sudor… ¿llega al 3×3?

Desde ASB GlassFloor manifiestan su alegría por la gran acogida de las jugadoras, factor decisivo, y Babinsky puntualiza dos detalles que mejoran esta cancha: “Las respuestas que hemos obtenido de las jugadoras en este reto, y antes, sobre el agarre del sueño y la capacidad para absorber el impacto han sido buenísimos. Una de las mayores promesas del baloncesto francés dijo que se cayó al suelo y que no le dolió, que era como magia. Además hay que tener en cuenta un dato: el calor que puede emanar de la cancha, ayuda a los jugadores a calentar antes teniendo en cuenta el frio que suelo hacer en los pabellones y además el sudor se evapora y por el tipo de superficie que es, es mucho más fácil detectar dónde ha caído sudor y limpiarlo que en parqué… así que esto también es una pequeña ventaja y avance en relación a la seguridad de los jugadores. Desde el punto de vista de calidad deportiva, creo que no hay que embellecer mucho al respecto. Puede que haya un punto en cuanto a la luminosidad y el enfriamiento de los LED ya que estamos muy interesados en llevar esta cancha al exterior para 3×3 por ejemplo”.

16,4 millones de luces LED y reparación express

El ‘jefe’ de ASB GlassFloor también destaca el impacto de los materiales empleados: “Para nosotros es muy importante la sostenibilidad y durabilidad de los materiales principales que empleamos, aluminio y cristal, y tras diversas exigentes pruebas la conclusión es que tienen una vida media de 70 años, con lo que la relación coste-durabilidad es tremenda. Además, hay que tener en cuenta que no hay que desmontar la pista para que al día futuro se dispute otro deporte”.

Al ser una cancha LED podría existir cierto miedo que algún tema eléctrico causara un problema o que incluso se rompiese un panel. Pero todo estaba bajo control. “Son más de 16,4 millones de luces LED -cada una lleva tres luces, roja, azur y verde- y 8.000 cables individuales, cada uno de ellos conectado por una persona, pero estábamos alerta. Tenemos planes de contingencia. Que se rompa uno de los paneles sería rarísimo, necesitaría un impacto duro como que un enamorado lanzara un objeto desde las gradas… podría haber algún problema técnico humano al conectar los cables, pero cambiar los paneles nos llevaría entre un minuto y medio o dos minutos. Lo vimos en la primera sesión de entrenamiento… tardamos 3.40” en cambiarlo sin estar totalmente preparados así que fue un gran test”, relata Babinsky.

Una cancha que mejora los entrenamientos

Babinsky incide en un factor importante: acabado el partido, esta cancha ayuda a los jugadores a embellecer y puede multiplicar el impacto de los entrenamientos. “Además, la pista tiene un potencial tremendo para usarse en modo entrenamiento, para dibujar jugadas de estrategia, para balizar ejercicios, hacer seguimientos, trazados, marcador, comprobar si los jugadores han realizado de forma correcta en el momento preciso la acción requerida… Hasta tal punto que se puede elaborar un programa nacional con la federación y enviarlo al resto de sus categorías inferiores o que incluso que haya enamorados que vayan a pabellones con esta cancha y paguen para hacer esos ejercicios y sentirse como los profesionales… y aquellos que logren una puntuación superior pueden tener la posibilidad de acudir a un entrenamiento con un técnico profesional de la federación”, apunta.

“Todos los deportes de interior son susceptibles de ser practicados en esa superficie. Ya hemos hecho voleibol, fútbol sala, balonmano, bádminton… cualquiera, y está acreditado para esto. También para deporte adaptado ya que nuestro suelo es ideal para las sillas. Y hay que tener en cuenta que hay distintas modalidades: desde la que se convierte en pantalla gigante a la que permite dibujar las líneas en función del deporte que se practique… y es importante que los jugadores entrenen en la misma superficie así que tenemos una opción más asequible”, finaliza.

Fuente y foto: FIBA

Compra aquí tu revista de agosto, con la Previa del Mundial
Suscríbete y recibe Gigantes cada mes

La entrada Habla el creador de la cancha LED: «Apenas hemos visto su potencial» aparece en Gigantes del Basket.

Más noticias