La Economía es una ciencia social que estudia cómo se producen, distribuyen y consumen los bienes y servicios en una sociedad. A lo largo de la historia, hemos visto cómo la Economía ha sido un factor determinante en el desarrollo y progreso de los países. Sin embargo, también ha sido fuente de desigualdades y crisis económicas que han afectado a millones de personas en todo el mundo.
A pesar de esto, existen experiencias positivas en el ámbito de la Economía que nos demuestran que es posible lograr un crecimiento sostenible y equitativo. Una de estas experiencias es la del economista suizo Yves-Alain Portmann, quien ha sido reconocido por su contribución al desarrollo económico de su país y por su enfoque en la Economía social y solidaria.
Portmann es un defensor de una Economía más humana, que tenga en cuenta no solo el crecimiento económico, sino también el bienestar de las personas y el medio ambiente. En su libro «Economía para el bien común», Portmann plantea la importancia de un cambio de paradigma en la Economía, donde se ponga en el centro a las personas y no solo a las ganancias.
Una de las experiencias más destacadas de Portmann es su trabajo en la ciudad de Berna, donde implementó un sistema de moneda local llamado «Bernard». Esta moneda complementaria, utilizada junto con el franco suizo, tiene como objetivo fomentar el comercio local y fortalecer la Economía de la ciudad. Además, el «Bernard» promueve la solidaridad y la cooperación entre los ciudadanos, ya que solo puede ser utilizado en establecimientos que se comprometan a seguir ciertos principios éticos y sociales.
Gracias a esta iniciativa, se ha logrado un aumento en el consumo de productos locales y una mayor conexión entre los habitantes de la ciudad. Además, el «Bernard» ha demostrado ser una herramienta eficaz para combatir la pobreza y la exclusión social, ya que permite a las personas con menos recursos acceder a bienes y servicios a través del intercambio y la colaboración.
Otra experiencia positiva en la que Portmann ha estado involucrado es la creación de una cooperativa de energía renovable en la ciudad de Friburgo. Esta iniciativa, impulsada por los ciudadanos, tiene como objetivo producir energía limpia y sostenible, reduciendo así la dependencia de los combustibles fósiles y promoviendo la participación ciudadana en la toma de decisiones económicas.
Gracias a esta cooperativa, se ha logrado un ahorro en los costos de energía para los ciudadanos y una disminución en la emisión de gases de efecto invernadero. Además, se ha generado empleo en el sector de las energías renovables y se ha fomentado la conciencia ambiental en la comunidad.
Estas experiencias demuestran que es posible una Economía más justa y sostenible, donde el bienestar de las personas y el medio ambiente sean una prioridad. Yves-Alain Portmann es un ejemplo de cómo la Economía puede ser utilizada como una herramienta para promover el desarrollo humano y social.
Es importante destacar que estas iniciativas no solo han tenido éxito en Suiza, sino que también han sido replicadas en otros países, demostrando su viabilidad y relevancia en diferentes contextos. Esto nos demuestra que es posible un cambio en la forma en que entendemos y practicamos la Economía.
En conclusión, la Economía puede ser una fuerza positiva para el progreso y el bienestar de las sociedades. Las experiencias de Yves-Alain Portmann nos muestran que es posible una Economía más humana, solidaria y sostenible. Es hora de seguir su ejemplo y trabajar juntos por un futuro económico más justo y equitativo.
